Nuestro banco ayudará a brindar a los médicos y hospitales el acceso a trasplantes de materia fecal, afirmó Ed Kuijper, uno de los profesores de microbiología del primer banco para donantes de caca. Aunque puede parecer escatológico, las heces son necesarias a la hora de ayudar a personas con infecciones intestinales graves, quienes necesitan incorporar bacterias a su sistema digestivo que sólo la caca de otro puede tener.
Así como lo lees: estos señores le meten la caca de otro a sus pacientes, ¡y de hecho así salvan vidas! Los donantes, aclara el profe, deben ser personas sanas, de peso regular y con una buena flora intestinal. Las donaciones de heces no son tan aceptadas como las donaciones de sangre, reflexiona Ed, consciente de lo difícil que puede ser para alguien donar amigos del interior. ¿Lo mejor? Estos bancos marrones no se encuentran sólo en Holanda, los amigos del norte ya lo vienen implementando desde el año pasado, aunque con aránceles. ¡Y vos que pensabas que todo eso no servía para nada!
Fuente: Periodismo.com