Al principio tuve un poco de miedo. Pensé que la serpiente estaría helada. Pero debo decir que no es así. Es tibia y cuando pulsa al masajear mi cuello, genera una sensación muy placentera, comenta Nadine, después de su paso por la vanguardista peluquería alemana Haar-Mode-Team. Monty, una pitón de 13 años, es la gran atracción de este establecimiento, ya que se encarga de los masajes de cuello que las clientes reciben mientras les cortan el pelo.
Por extraño que parezca, este ejercicio le permite a Monty relajarse, y parece ser muy útil en la lucha contra las contracturas. La única cuestión es quién se anima a permitir que una serpiente le rodee el cuellito como si nada.
¿Vos te la bancás con Monty?
Fuente: Upsocl