Con la llegada del Frapuccino, hemos llegado al límite. La inaudita pasión por los Unicornios tiene que parar, y tiene que parar ahora. Pelucas, maquillajes, joyas, bebidas, el trío de celeste, rosa y violeta nos ha invadido por completo, y no sabemos cuándo podremos pararlo. ¿Qué dirán los caballos comunes sobre todo esto? ¿Y qué pasaría si realmente hubiera unicornios paseando por algún bosque?
Si existen, espero que jamás los encontremos.
Fuente: Bored Panda