La abuela llamada Doris Ayling de 99 años de edad no podía creer la carta que le llegó de un hospital de Reino Unido, donde decía que debía presentarse cuanto antes para hacerse estudios: “su condición es delicada, usted está embarazada y no se hizo los análisis clínicos necesarios a la fecha de hoy”, decía la carta. Doris vive en las afueras de Londres con su hijo mayor de 78 años, que al escuchar la noticia se alegró mucho,pues siempre quiso tener un hermanito.

Por supuesto que fue un error. Unos días después llegó del mismo hospital otra carta pidiendo disculpas. Al parecer, mezclaron los datos y equivocaron la dirección. Lo raro es que Doris no se atiende en esa clínica, y ésta ni siquiera es cercana a su casa. Parece que la institución confundió a una paciente del mismo nombre que se hizo unos estudios hace unos meses por su embarazo, pero decidió seguir su tratamiento en otra entidad hospitalaria.