Hay talentos con los que uno simplemente, nace. Puede ser una buena voz, una figura imponente, un carisma imparable, o tal vez la lengua más ancha del mundo. 

Byron Schlenker y su hija comparten mucho más que los genes. Ambos poseen de las lenguas más anchas del planeta, y ni de casualidad ocultarían semejante talento. La de Byron mide de 8,6 cm de ancho, el mismo ancho que un chop de cerveza y 2 cm más ancho que un iPhone 6. Y su hija Emily, de 14 años, ya posee una de 7.3cm. Toda una herencia.

Ídolo en su tierra natal, Syracuse, Nueva York, Byron ya fue coronado con el Record Guinness a la lengua más ancha del mundo, y sus vecinos no lo pueden creer. Una señora me pidió que lamiera su Libro Guinness, lo que rechacé cortésmente, contó este padre de familia, que tiene además otras dos hijas que, sin embargo, no gozan de sus mismas características lingüísticas.

No podía creer que iba a estar en el Libro Guinness de los Récords Mundiales, un libro que he amado desde que tengo memoria, confesó Byron, orgulloso también de que nada más y nada menos que su hija sea la dueña del galardón femenino a la lengua más ancha. ¿Vos les pedirías una selfie si te los cruzás?