Hubiera podido eliminar a cualquiera, incluso los comentarios de Justin Beiber, confesó Jani, el hacker de 10 años que le ahorró varios dolores de cabeza a Instagram, descubriendo una vulnerabilidad que permitía borrar comentarios ajenos si se hackeaba el sistema.
De nacionalidad finlandesa, Jani se dedica a buscar errores de este tipo junto a su hermano gemelo. La corporación Facebook, dueña de Instagram, pagó al niño 12 mil dólares por su servicio, dinero con el que Jani planea comprar bicicletas, pelotas y, claro, computadoras nuevas para él y su hermano.
Fuente: BBC