¿Intensidad? Intensidad tiene el caso de Paulina Casillas Landeros, una chica mexicana que decidió mandarle su propio ombligo al EX. Así, como un regalito…

No era la primera cirugía para Paulina Casillas Landeros: también había partido su lengua al medio e, incluso, se había colocado piercings en la columna (auch) Pero, sin dudas, el sacarse el ombligo para regalárselo a su novio es un acto sorprendente… Y muy frikiante.

La joven ha explicado que esta era una forma de separarse de su familia, con la que sostenía numerosos conflictos. También ha relatado que su curioso obsequio fue como entregarle un amuleto de amor a su novio de ese entonces, quien fuera su sostén durante los tiempos difíciles que la aquejaban en ese momento.

Paulina, sin embargo, se arrepiente de su extraña operación. Esto me enseñó a pensar antes de actuar, ha declarado. Con respecto al ombligo en cuestión, su ahora EX sigue conservándolo. Él sabe lo que significaba ese regalo, dice Paulina. 

Nadie le puede negar que había compromiso…